Son las 4:35 pm, dice mi reloj. Llegaré a tiempo a mi trabajo de empaque en el TUTTUS-TUUS market…¡¡El tren frenó!! Y casi me fui de hoci al suelo (que irónico, justo no tomo los buses de la mafia de Talagantito por los frenazos y lo que me acaba de pasar).

Malas noticias, un grupo de flaites sin materia gris se robaron los cables alimentadores de electricidad para el tren que yo circulaba. La detención fue en Saint Any of Chela, a unos kilómetros de Talagantito y no queda otra que tomar uno de los tocomochos de la mafia, esperando mas de la cuenta porque todos venían abarrotados como latas de sardinas.

Después de 45 minutos de tedio. Logre tomar una que venia desde Loretín (la única que viene vacía). Llegué al supermercado y justo me estaba esperando el gordito vestido de negro y que además su piel … (mejor no sigo escribiendo para evitar un chiste que a lo mejor tenga connotaciones racistas sin querer) diciendo que cometí el pecado capital de mi trabajo y que merecía la máxima de las penas del averno, y para mas remate lo dijo en frente de la persona que encuentro mas interesante del supermercado.

El castigo fue horrible: Fui obligado a subir a los pisos administrativos y ser despedido por mi máximo de máximo de jefes jefazos…No, fue algo peor: Me pasaron el micrófono y me pasaron una lista de 10 palabras cacofónicas, justo las más difíciles para mí. Esto me pone en ridículo porque se me enreda la lengua y no me gusta mi propia voz que esta vez salió peor que nunca…tuve que decir:

· Etcétera

· Paralelepípedo

· Trinigonometría

· Compota

· Aserradero

· Otorrinolaringologo

· Perquilauquen

· Michimalonco

· Chocolatástico

· Ovoviparo

· Positronico

Que la santa inquisición me hubiese castigado en lugar de este…(no quiero decir tallas que suenen racistas). No se si quiera ni siquiera volver a acordarme de una de estas palabras.

Cuando bajé a salir del súper, porque perdí el turno; justo la persona interesante para mí estaba de colación en el Doggo´s y me invitó para su mesa, pidiendo que repitiera una de las palabras que tuve que decir como castigo y mencioné la labra trinigonometría. Ella rio, pero de ternura, diciendome: mejor te sale la voz tal cual, sin micrófono, pero lo importante que es que te armaste de valor y no te achicaste ante el chico que te hizo esto. Se me vino en la mente la frase “La trigonometría abarca los triángulos ¿puede estudiar también los triángulos amorosos?”.

No hay mal que por bien no venga, así que “conversamos de todo un poco y todo nos causaba risa, como los tontos” diría Franco de Vita en una de sus canciones, y los chiquillos trabajaron duro ese día, al igual que el chico que me castigó con una cara de picado.

Así que me fui más temprano para la casa y tuve la conversa más interesante de toda mi vida. Contento con esto lo voy a coronar hiendo a uno de mis lugares favoritos del Talagantito. Mas detalles en el próximo capitulo…